miércoles, 30 de enero de 2013

Carta abierta

Respetado lector

Sea invitado a una parte de lo que soy. La materialización de esta porción, que de mi se desprende, viene empacada a través de palabras. Concibo escribir como un acto de honestidad. Otorgar una forma, una expresión al pensamiento. Sembrar semillas de memoria. Un salto al vacío. 

Partiendo de la ambiciosa pretensión de evitar engañar, le hago la siguiente advertencia: voy a escribir sobre mis deleites. No quiero parecer descortés o grosero, simplemente, considero que es la mínima libertad que debe ser concedida con para quien escribe. Espero no molestarlo ni ahora ni durante la vigencia del blog. 

Dicho lo anterior, sírvase de leer las siguientes lineas cuando le plazca.

Con aprecio

Alejandro Rodríguez Sánchez
Capitán de un barco sin titulo




2 comentarios: